La ansiedad, propia de todas las edades, es una emoción que activa nuestro sistema nervioso autónomo ante estímulos que pueden suponer una amenaza. Es algo natural y bueno en algunas ocasiones ya que activa los recursos físicos de nuestro organismo ante situaciones difíciles.

 

La ansiedad se convierte en problema cuando es demasiado intensa y cuando aparece ante situaciones donde no hay motivo de alarma real y lo hace de forma anticipatoria y continuada en el tiempo.

 

La ansiedad no es algo abstracto, se concreta en tres componentes; uno es el relativo a lo que se piensa cuando se está asustado, otro son las respuestas emocionales y psicofisiológicas de nuestro organismo y el tercero tiene que ver con la tensión muscular y las acciones que realizamos cuando estamos ansiosos. Estos tres componentes actúan de forma conjunta para prepararnos ante lo que interpretamos como un peligro por llegar.

ansiedad fobia juvenil

Los niños y niñas, así como los jóvenes, manifiestan trastornos de ansiedad, al igual que los adultos, aunque con unas especiales características. Algunos acontecimientos como el comienzo de las clases, un cambio de domicilio, el nacimiento de un hermanito, un divorcio y otros problemas pueden precipitar la aparición de la ansiedad.

 

En el caso infantil y juvenil, las consecuencias de los trastornos de ansiedad pueden afectar más que a los adultos ya que puede interferir en su normal proceso de crecimiento y maduración y es por ello que debemos prestarles especial atención.

 

Los trastornos de ansiedad más comunes en el ámbito infantil y juvenil son: trastorno por ansiedad social, el trastorno de ansiedad por separación, el trastorno de ansiedad generalizada, el trastorno de pánico, el trastorno obsesivo-compulsivo y trastorno por estrés postraumático.

tabla miedos

Relacionado con la ansiedad están las fobias, que en los niños, niñas y jóvenes se manifiestan principalmente en fobia a la oscuridad, fobia a los animales, fobia a la sangre-inyección-daño, fobia a los médicos, fobias a fenómenos naturales y fobia al fracaso y la crítica (fobia social).

Las fobias se dan cuando el miedo y la ansiedad son muy desproporcionados en relación al estímulo temido y además ante ello, se produce una respuesta negativa de alta intensidad, como gritos, llantos, rabieta, temblores, náuseas, mareos, pesadillas. Las fobias limitan la realización de actividades normales.

En nuestra consulta estamos capacitados para una correcta evaluación del trastorno en cuestión y utilizamos protocolos terapéuticos eficaces de terapia cognitivo-conductual y de entrenamiento en manejo de ansiedad familiar.

Nuestras intervenciones se realizan individualmente con el menor de edad y puntualmente con los padres y familiares. El objetivo es el de enseñar a los niños, niñas y jóvenes a enfrentar las situaciones difíciles y a controlar las emociones negativas, en especial la ansiedad.

A continuación detallamos una tabla de miedos infantiles normales. Cuando alguno de estos persiste más allá de la edad y provoca un alto grado de malestar en el menor de edad o limita su desarrollo, es cuando tendremos que preocuparnos y abordarlo de manera específica.